Hoy celebramos la riqueza cultural, la resistencia histórica y la identidad de las comunidades afrocolombianas. Esta fecha nos invita a reconocer el valor de sus aportes en todos los ámbitos de la vida nacional: en la música, el arte, la educación, la lucha por los derechos humanos y la construcción de un país más justo e incluyente.
También es un momento para reflexionar sobre las desigualdades y el racismo estructural que aún persisten. Conmemorar este día es un acto de memoria, de justicia y de orgullo.
Afrocolombianidad es dignidad, es fuerza, es identidad.
Hoy honramos su historia, celebramos su presente y nos comprometemos con un futuro en igualdad.
